Danza para todos, Compañía de Danza Folclórica Convergencias celebra 45 años de existencia en el CCMB

El abrazo entre Valentina Loaiza y Alejandro Monsalvo selló una plena satisfacción por el presente y el pasado, por la continuidad de un proyecto de vida que han llevado a productivas travesías que involucra el quehacer de un eficaz equipo de trabajo a la vuelta de 45 años de existencia de la Compañía de Danza Folclórica Convergencias de Texcoco.

El respaldo institucional y familiar de Hugo Loaiza para el desarrollo de Convergencias ha sido vital.

Es por eso que han celebrado en todo lo alto su 45 años de fructífera labor dancistica con una función de gala en la Sala Principal del Centro Cultural Mexiquense Bicentenario (CCMB).

Amigos y familiares estuvieron presentes en ese día especial. Las autoridades municipales también hicieron acto de presencia para disfrutar la variada gama de bailables de prácticamente toda la República que ejecutaron los diversos grupos infantiles y juveniles de Convergencias.

 Fue una espectacular presentación de cuadros del norte, sur y centro del país.

El alcalde de Texcoco, Nazario Gutiérrez Martínez, expresó su gratitud por la invitación y felicitó ampliamente a Valentina Loaiza y Alejandro Monsalvo, pero en especial a los pequeños integrantes de la Compañía de Danza Folclórica.

 En sus redes sociales, un poco más tarde del evento, manifestaron lo siguiente:

 ¡Celebramos en grande!

Agradecemos a cada uno de nuestros bailarines y bailarinas por hacer esto posible, a los padres de familia de nuestros alumnos por ser parte primordial en la formación de sus pequeños, a nuestros maestros Gustavo Cruz, Francisco Álvarez, Citlali Zavala, y a los asistentes de clase. A nuestra vestuarista Silvia Almaraz por tan arduo trabajo para que podamos lucir en el escenario.

Y felicitamos a nuestra Directora Fundadora y a nuestro Subdirector los profesores Valentina Loaiza Almaraz y Alejandro Monsalvo De la Rosa, que sean muchos años más en este bello mundo del arte.

"La danza para todos"

La presentación resultó un fastuoso torbellino de luces y colores, y un emotivo enjambre de emociones colectivas durante la ejecución de sones y jarabes.